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EL BOXEADOR
El boxeo es un tema recurrente en la novela y el cine con
acercamientos desde el biopic (Toro
Salvaje -1980) o el cuento de hadas en forma de “sueño americano” (Rocky -1976). En cualquier caso hay
elementos comunes a estas historias que podemos encontrar en “El boxeador” para
mí la mejor NOVELA GRÁFICA del año.
Rubén del Rincón Y Manolo Carot (Man) son dos autores con
importante trayectoria nacional e internacional
que se han atrevido con uno de esos proyectos (primero nació como un
crowdfounding) que tiene mucho de personal y poco de comercial.
El álbum es un ejercicio narrativo donde cada autor desgrana
a un personaje diferente . Ambos serán los antagonistas en la (¿cómo no?) pelea
decisiva. No os dejéis engañar la pelea es una excusa.
Dos momentos personales,
dos vidas se van contando desde lados opuestos del álbum y es el lector quién lee
de forma consecutiva o (como Rayuela) alternando páginas de cada historia (yo
lo he hecho y el resultado es sorprendente) porque la historia va fluyendo
desde ambos lados.
En una ,Man, nos habla de un chico que “lo tiene todo” , con
su vida programada y unos padres afortunados y en la otra ,Rubén del Rincón,
nos acerca la vida de un huérfano que
vive en un burdel y que trata de
triunfar de la mejor manera posible . Este busca el éxito a través del boxeo el
otro vive en él éxito y busca en el boxeo reivindicarse como individuo. Ambos
comparten conocidos del lumpén (como no) y… pero no pienso hacer “spoliers”.
Lo primero destacar es el oficio narrativo de ambos autores.
El dibujo (el de ambos) es un directo de derecha. Crudo, claro, no exento de
manierismo si el momento de la historia lo requiere y, sobretodo, extraordinariamente
efectivo .Trazo, bitono y narración casan como un guante (de boxeo) en estos
dos estilos reconocibles, diferentes e
impactantes.
Estamos ante una obra que estuvo nominada en el salón de
Barcelona y en mi modesta opinión un trabajo y un álbum del que uno se siente
orgulloso de tener en la estantería.
Tardaremos décadas en volver a ver una locura tan hermosa
como esta pasar al papel.
No sé con exactitud como acabó el álbum en manos de “Ediciones La Cúpula” pero hay que destacar que la edición es fantástica , un placer para
los ojos y las manos. Agradecer a cada
uno de los que han hecho posible que un “artefacto” hecho con tanta devoción y
cariño llegue a las librerías en estos
tiempos es poca cosa, lo sé, pero hay que hacerlo.
En fin, una obra
redonda. Después de dibujar algo así uno puede morirse satisfecho. Comprad y
leed.
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